lunes, 2 de abril de 2018

Tú, yo y el cosmos (Poema)


Se percibe un secreto en las presencias
minerales, en objetos cotidianos, en el fuego y el humo,
en el agua. Especie de temblor,
pálpito de la materia 
-tan turgente como acogedora y límpida-
que nos frena el paso ante un matorral poco frondoso
o ante una hilera de columnas
de un viejo templo, allá en Roma.
Ignoramos que el delfín y la isla, con su esencial solidez, nos alimentan, 
que solos no seríamos más que fluidos
disgregándose
por los mil resquicios del planeta,
subrepticiamente.
Que si llegan a abandonarnos,
acabaremos impregnados de esa ambigüedad tan propia de los seres
incorpóreos
y nos esfumaremos tras el vidrio de lo inexistente.
Desengañémonos:
sin universo que se avenga a contemplarnos
nunca llegaríamos a ser.

4 comentarios:

  1. Cierto, ni nosotros seríamos sin el universo ni el universo sería sin nosotros, al menos como lo consideramos...un saludo.

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  2. Saludos, Maru. Un placer verte por aquí.
    La interpretación de un poema es un asunto complejo, porque lo escribes en un estado especial, como de éxtasis. Yo me dejo llevar también por imágenes muy visuales que tengo en la cabeza. Tu explicación es la más científica y lo que quise decir conscientemente, pero supongo que hay más niveles, aunque sólo los descubres cuando has puesto un poco de distancia: el cotidiano, el onírico, el psicológico, el relacional...
    De ahí que esto de la poesía sea tan complicado y fascinante.

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  3. Me parece un poema precioso con muchas lecturas, ya que el Arte se observa e interpreta con el filtro de la propia experiencia vital y la sensibilidad de cada cual.

    Para mí habla de la soledad, de esas ausencias que nos marcan, de esas presencias que anhelamos.

    Muchas veces nos sentimos perdidos en un "cosmos" para el que somos invisibles cuando estamos o nos sentimos solos.

    Me encanta como escribes, mucho, pero seguir tus novelas por entregas es un poco complicado para mí que no me gusta leer en digital rato y, sobre todo, buscar el modo de leer los capitulos en orden... sin tener que dar veinte vueltas por el blog.

    Te eo como un picoteo, capítulos sueltos... y disfruto también así de tu talento.

    Un abrazo,

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  4. Y yo te lo agradezco, Tesa. También que hayas hecho tu propia interpretación del poema.

    Las novelas quedaron a medias y ahora estoy recuperando los capítulos antiguos. Tienes razón en que es bastante lioso, pero si alguna vez quieres echar un ojo a alguna, pinchando en las etiquetas (Baronesa o Árboles azules) se accede directamente a los capítulos.

    Besitos

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